Producción de cera y panales de abejas
La cera de abejas, uno de los principales productos de estos insectos, es la materia prima con la que construyen los panales que forman su nido. Las encargadas de fabricar los panales, son las jóvenes abejas obreras de entre doce y diecisiete días, que son las únicas con capacidad para producir cera.
Fabricación de la cera
A esa temprana edad se desarrollan en el cuerpo de las abejas obrera las llamadas glándulas cereras, situadas en la cara ventral del abdomen entre los anillos cuarto y séptimo, en un número total de ocho, un par por cada anillo. Estas glándulas son las que les permiten producir la secreción grasosa que llamamos cera.
Para hacerlo, previamente deben consumir gran cantidad de miel, ya que por cada kilo de cera que fabriquen, necesitan entre siete y diez kilos de miel.
Fabricación de los panales
Mientras segregan la cera, las abejas se unen colgando unas de otras, formando cadenas que cuelgan de la parte superior del panal que deseen construir. Dicho panal, será construido desde arriba hacia abajo.
La cera sale del cuerpo de la abeja como un fluido, pero rápidamente se enfría y endurece al quedar expuesta al aire. Las obreras raspan las escamas de cera de su abdomen con sus patas, y se las llevan a la boca, donde las mastican hasta que se hacen moldeables y pueden hacer con ella pequeñas bolitas. A continuación, van pasando estas bolitas a las abejas que tiene por encima en la cadena, hasta llegar a las últimas, que serán las encargadas de dar forma a las celdas que componen los panales.
Una gran parte, de la cera extraída de las colmenas, vuelve de nuevo a ellas en forma de láminas de cera, para que las abejas puedan fabricar nuevos panales. En la antigüedad, toda la cera era destinada a la fabricación de velas, ya que no había otros sustitutos para el alumbrado de las viviendas. Todavía hay religiones, que no permiten en sus templos, otras velas que no sean las fabricadas con cera de abejas, siendo grandes consumidores de los excedentes de cera de los apicultores.
Otros destinos de la cera son muy diversos, divididos entre la industria, agricultura, etc.
Es empleada en la electrónica, en armamento, industria textil, industria vidriera, galvanoplastia, industria papelera, etc. Se utiliza en agricultura en preparaciones para injertos. En medicina, en diversos bálsamos, ungüentos, supositorios, pomadas, emplastos. En cosmética, en la composición de cremas limpiadoras, astringentes, de belleza, de afeitar; de barras de labios.
Los productos que contienen cera de abejas, suavizan la piel. La cera blanca entra normalmente en la composición de cremas nutritivas, astringentes, de limpieza, y en mascarillas para el cutis. Constituye una excelente sustancia de base para la mayor parte de los productos cosméticos.
Sirve para preparar una pastilla de mascar que tiene como cualidades, entre otras, las de activar la secreción de saliva y de jugo gástrico, destruir el sarro dentario y la deposición de nicotina en los fumadores.
El Doctor D.K. Yarwiss, en su libro editado en Nueva York, recomienda mascar un preparado de cera y de miel para limpiar las vías nasofaríngeas, y como remedio insustituible en caso de sinusitis, asma, fiebre del heno. Las personas que padecen estas dolencias, deben mascar durante 15 minutos cada hora, media cucharada de las de café de opérculos de cera (es la parte con la que las abejas sellan las celdas llenas de miel y que los apicultores cortan, para poder extraer la miel de los panales).